martes, 8 de febrero de 2011

Tango, melodias de arrabal

A uno, que para bailar siempre ha necesitado doping (término con el que al parecer, y viendo la campaña desatada en los medios,  nos quieren ocultar otras informaciones), y que pese a denodados esfuerzos en romerías y verbenas, nunca pasó de hacer el ridículo más espantoso, siempre le quedó la espinita de parecerse a Al Pacino en Esencia de Mujer, o en su defecto visitar la calle Corrientes de Buenos Aires para ver si se impregnaba, no le queda otra que tirar de estoicismo de viejo tanguista, y ofreceros este pequeño pero sentido homenaje a tan popular y barrio bajera manifestación. No echéis en falta al gran Carlos Gardel, pues este merece comentario aparte.

Barrio plateado por la luna,
Rumores de milonga
Es toda tu fortuna.
Hay un fuelle que rezonga
En la cortada mistonga.
Mientras que una pebeta
Linda como una flor,
Espera coqueta
Bajo la quieta luz de un farol.

Barrio... barrio...
Que tenes el alma inquieta
De un gorrion sentimental.
Penas... ruegos...
Es todo el barrio malevo
Melodia de arrabal.

Viejo... barrio...
Perdona que al evocarte
Se me pianta un lagrimon.
Que al rodar en tu empedrao
Es un beso prolongao
Que te da mi corazón.

Cuna de tauras y cantores
De broncas y entreveros
De todos mis amores;
En tus muros con mi acero
Yo grabe nombres que quiero:
Rosa, la milonguita...
Era rubia margot...
En la primera cita
La paica rita
Me dio su amor.


Barrio... barrio...
Que tenes el alma inquieta
De un gorrion sentimental.
Penas... ruegos...
Es todo el barrio malevo
Melodia de arrabal.


Viejo... barrio...
Perdona si al evocarte
Se me pianta un lagrimon.
Que al rodar en tu empedrao
Es un beso prolongao
Que te da mi corazón.

 





No hay comentarios: