Si Duke Ellington contó con un grupo de fieles trombonistas en su orquesta: Joseph Tricky Sam Nanton, Lawrence Brown y el popular Juan Tizol, Count Basie tuvo a su lado el cálido y fogoso soplo de Al Grey, un señor trombonista que se sobraba solo y que pasará a la historia grande del jazz por su música gloriosa y su sonrisa.
Fotografía : Esther Cidoncha |
Al Grey prestó servicios en algunas de las más reputadas formaciones de jazz de los 40 y 50, desde las bandas de Bennie Carter, Jimmie Lunceford, y Lionel Hamptonhasta las enérgicas orquestas de Dizzy Gillespie o el citado Count Basie. También lideró algunas aventuras, junto a los saxofonistas Bruce Mitchell y Jimmy Forrest, y en los últimos años apareció junto a músicos venerables como Buddy Tate o avalando a su hijo Mike, trombonista como él. El risueño Al Grey resultó fundamental en la gestación del bebop en los 40, dotando al rígido trombón de la energía y viveza que había impuesto Charlie Parker con su estilo. Al Grey es, sin duda, uno de los mejores trombonistas de la "edad media" del jazz, tanto por las fuertes vibraciones que hacia sacar a su instrumento, como por la riqueza de ideas musicales, siempre muy concentradas en el fraseo esencial, exento de retórica.
En efecto, Al Grey, debutó con la orquesta de Benny Carter en 1945, y esta circunstancia le permitió demostrar desde un principio sus cualidades como solista, gracias a que Carter que concedía mucho espacio a los músicos de su banda. Ello hizo que ciertas cualidades naturales en Grey fuesen refinadas, lo lo que unido a su fuerte ataque y a una innata sensibilidad rítmica en el campo del "swing" hicieran de él un músico muy interesante. Con Carter se valía de los excelentes arreglos de este.
De ahí pasó a la orquesta de Lionel Hampton donde destacó tanto como músico solista como instrumental en la orquesta en los temas Wee Albert y Rap Mop grabados en 1949. Después de un breve periodo en la banda de Sonny Parker, Grey entró a formar parte de la banda de Gillespie, y ello le dio la oportunidad de elaborar un estilo más incisivo y moderno. Este hecho daría sus frutos cuando Grey, entra en la orquesta de Count Basie, junto a Henry Coker y Benny Powell, cuando la orquesta de Basie se encontraba en un periodo de regeneración formal y de contenido. Allí formaría una de las líneas de vientos más poderosas junto al saxo Eddie Lockjaw Davis. El nuevo sonido de Basie y la pureza del mismo fue un marco perfecto para el fraseo de Grey, que se convirtió en uno de los solistas protagonistas de la orquesta, como por ejemplo ocurrió en el tema I need to be bee´d with de 1958.
Poco antes de su muerte realizó uno de estos conciertos en Madrid, en donde se "mezclaban" los aires "viejos" ( con la presencia de Clark Terry, por ejemplo) y los nuevos ( Nicolás Payton), dando lugar a espectáculos musicales llenos de emoción, alegría, y excelente ejecución. Con la orquesta de Basie permaneció hasta finales de los 70 tomando algunas temporadas de descanso. Grey deja sabrosas grabaciones como las protagonizadas junto a la Count Basie's Orchestra, Frank Sinatra, Dizzy Gillespie, o Thinking Mans Trombone. Y su eterna sonrisa, claro.
A punto de cumplir 75 años, sus labios esbozaron una última mueca, con la mirada puesta en su trombón de varas.
5 comentarios:
Uno de los grandes. Si toda esa gente lo llamó para que tocase con ellos, por algo sería.
Magnífica foto de Esther Cidoncha.
Dicen del agua bendita que algo tendrá.
Otro gran trombonista, tocó también con JJ Johnson, cosa normal.
Jo, pero lo que le gusta la sordina.
La música que has puesto a la derecha es buenísima.
Me alegro de que sea de su gusto.
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