Daniel Barenboim (Buenos Aires, 1942) no es economista «ni entiendo de economía», vaya esa confesión por delante.
Quizá por eso no comprende «cómo se ha llegado a la situación actual, que no es un problema local sino algo global que afecta a todos. Me lo han tratado de explicar varias personas —reconoce— pero no lo llego a entender».
Tampoco comprende, «ni quiero hacerlo», los recortes que está sufriendo la cultura, la primera víctima a la que se apunta por considerarla prescindible.
"Miren, hago lo que puedo para volver a convertir la música en imprescindible", defendió ya solo ante los periodistas y molesto por lo que considera una "falta de sinceridad y honestidad” de los políticos.
“La música no forma parte de la educación normal”, ha argumentado, “ellos dicen que la música y la cultura cuesta demasiado porque no hay suficiente gente interesada, pero son los políticos los que la convierten en elitista”.
"Si hubiera educación musical, no haría falta tanta subvención"
"Si este Gobierno no considera el conflicto árabe-israelí de su interés, ya se verá", afirma el director de orquesta y pianista
2 comentarios:
“ellos dicen que la música y la cultura cuesta demasiado porque no hay suficiente gente interesada, pero son los políticos los que la convierten en elitista”.
Ni más ni menos.
Muy buenas las versiones de la música de Ellington. Yo lo más que he visto a Barenboim es dirigiendo una orquesta en la Porticada, pero no sabía que también hacía estas cosas. Fantástico.
Es grande.
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