viernes, 4 de octubre de 2013

Ralph Towner



Hijo de un trompetista y de una profesora de piano, el guitarrista, Ralph Towner, aunque de niño estudió ambos instrumentos, solo fue cuando entró en la Universidad de Oregón en 1958, cuando se dedicó en serio a la música. Allí estudio composición y teoría, además de profundizar en el aprendizaje de la trompeta, hasta entonces, su instrumento preferido. En 1962, decidió cambiarse a la guitarra coincidiendo con el ultimo año de Universidad.

En 1963, marchó a Austria donde estudió guitarra clásica durante todo un año en la"Vienna Academy of Music" con el profesor, Karl Sheltt. Un breve periodo de interrupción lo traslada a su país de nuevo con la intención de doctorarse en sus estudios, y nuevamente regresa a Viena para continuar con Sheltt, ya hasta 1967. Terminado su periplo europeo, cuando regresa a New York, toca el piano con Astrud Gilberto y también con el grupo de Dave Holland. Llama la atención de Miles Davis y también de Keith Jarrett, quienes le contratan para alguno de sus proyectos. Adoptó la guitarra de doce cuerdas y entró a formar parte del combo de John McLaughin, en el que estaba también, Jimmy Garrison y Winter Consort. Los "Tamba Four" como se les denominó alcanzaron un gran éxito y le sirvió para colaborar con Gary Burton y su grupo "Oregón" en el que tocaban un amplio abanico desde la música rock a la clásica.

En 1974, la revista especializada Down Beat, le otorgó el primer puesto en el refrendun de los críticos de jazz como mejor instrumentista de guitarra, y ello le abrió las puertas del mundo del jazz definitivamente. Viajó a Europa en varias ocasiones, actuando en los Festivales de Berlín y Suecia. Sus discos, excelentes la gran mayoría, han sido todos grabados para el sello ECM y es muy destacable el grabado en 2001 titulado "Anthem" y donde alterna los temas con la guitarra clásica y la de doce cuerdas.
   

2 comentarios:

marian dijo...

Me gustan los dos, el guitarrista y el tema.

Sirgatopardo dijo...

Es que tanto el uno como el otro, son estupendos.