El armonicista Larry Adler comenzó a tocar en público a la edad de 14 años cuando ganó un concurso con facilidad. Es uno de los primeros y más grandes intérpretes de la harmónica en jazz, blues y clásica. Entre 1930 y 1940 actuó repetidas veces en New York tras firmar un contrato con el empresario Florenz Ziegfeld. Participó en un famoso programa radiofónico titulado "Flyng Colors" en el Theatre Imperial. En 1935 se trasladó a Holywood contratado por la Metro Goldwyn Mayer y por la Paramount participando en la película Manny Happy Returns donde tocaba la pieza Sophisticated Lady en la orquesta de Duke Ellington.
En 1935 viajó por primera vez a Europa y en Londres intervino en el espectáculo "Streamline". Su estancia en el viejo continente le sirvió para darse a conocer en Francia en los numerosos espectáculos de vaudeville que se representaban en la capital francesa. De vuelta en Londres, en 1942, actuó como solista en la London Symphony Orchestra lo que le permitió adquirir fama y notoriedad publica. En Francia grabó con el quinteto del Hot Club de France, que lideraba Django Reinhardt junto a Stephane Grappelli. Fue nominado al Oscar en 1953 por su trabajo en la banda sonora de la película "Genevieve", a pesar de que no aparecía en los créditos, debido a que fue uno de los muchos artistas perseguidos por la política inquisitorial del senador McCarthy; hecho que le obligó a trasladar su residencia a Inglaterra en 1949 acusado de pertenecer al Partido Comunista de los Estados Unidos.
Su registro más importante se dio en "Virtuoso of the Mouth Organ", donde junto con Stéphane Grappelli y Django Reinhardt entre otros, ofreció una magistral y virtuosa interpretación a la harmónica de temas clásicos de jazz y clásica de compositores famosos como Manuel de Falla, Debussy, Cole Porter, Duke Ellington, George Gershwin, Harold Arlen, o Irving Berlin.
7 comentarios:
La harmónica es un instrumento que siempre me fascinó. Quizás por su carárcter minoritario.
Y, ¡joer!, cólo la domina este hombre. Se puede decir que la eleva a instrumneto solista de orquesta (eso me recuerda a Andrés Segovia).
Qué cosas tan maravillosas se pueden hacer con talento, sensibilidad y técnica.
Una vez, varios años ya, esuché en nosequé concurso de televisión a una persona tocar El Amor Brujo de Falla: ¡im-presionante!, que diría aquél.
Un saludo y disfruta del jueves, Gato.
Gracias, igualmente, no cocines demasiado...
Fantástico. Un instrumento aparentemente modesto que es capaz de adaptarse a todo tipo de música y darle un nuevo sentido.
No he escuchado la versión en armónica de Rhapody in Blue del amigo Adler, pero seguro que es una pasada. Si alguien puede decirme cómo hacerme con ella le estaré infinitamente agradecido.
Quise decir Rhapsody in Blue, claro.
Le debo de tener en alguna grabación, pero no me acordaba de él.
Es magnífico su estilo.
Vd,como virtuoso del instrumento, tendrá mayor objetividad.
Virtuoso? Que más quisiera yo...
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